que llames a mi puerta, amor.
Pero no apareces.
Llegará el verano y secará
las flores fugaces del almendro.
Pronto disfrutaré
su pequeño fruto tan amargo,
y me pregunto ahora por qué,
mientras aún te espero,
no quieres compartirlo conmigo.
FLG
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Esta bitácora agradece tus comentarios. ¡Son un regalo y una forma de crecer!